Alrededores de Arnhem

5 de julio de 2021

Amanezco a orillas del canal en la localidad de Ooij, con una suave llovizna que hace que retrase bastante la salida. Hay tres cotas en las inmediaciones de Arnhem y he diseñado una ruta circular para hacerlas todas. Es como un paseo, de escasa entidad.

XTREM CAT 1 CAT 2 CAT 3 CAT 4


Alrededores de Arnhem Ooij 95 km 665 m+ IR



El caso es que casi me viene bien que los policías de ayer me mandaran para aquí, porque eso hace que tenga tres kilómetros completamente llanos hasta Beek, donde empezará la primera subida.


En Beek me encuentro con pavé y sigo el track que tengo marcado para localizar la calle que tira para arriba. Y es que a subida a Oude Holleweg no es más que eso, una calle que sube a la colina por un kilómetro recto.


La ascensión culmina en un cruce, en una barriada típica de este país. A partir de ahí ya me tengo que meter en un carril bici lateral con baldosines, ya que si te sales te pitan los coches como si fueras un leopardo salvaje suelto en medio de la población.


Pues nada, toca compartir trazado con los ciclistas urbanos, rodando a ritmo de niño pequeño con cestillo y ruedines. A ver, que mi sitio es la carretera y aquí no me siento seguro.


Cruzo un canal que se llama Waal en la localidad de Nijmegen. Vuelvo a rodar por baldosines mientras la gente que vive en tubos me mira por sus ventanales descubiertos de cortinas.


Entro por una parte de localidad con grandes avenidas, siempre con un carril bici para rodar por él. El terreno es llano como un plato, sin un solo metro de desnivel.


Llego a Arnhem tras cruzar el Nederrijn, que es como se llama el río Rin en la parte holandesa. Por aquí está el piso muy mojado pero sigue sin llover.


El peor tramo de toda jornada es el que me lleva por el centro de la ciudad. Sigo una línea de tranvía en dirección oeste.


Pocos kilómetros después, me encuentro en un bosque con una pequeña colina a la que hay que subir. Es el Italianse Weg, otra tachuelilla de escasa entidad pero que tiene punto para el juego.


Apenas es otro kilómetro al 4% para subir por una pista estrecha que va entre los árboles. Me imagino que esto será un repechón tipo emboscada en las carreras de la zona.


Bueno, es lo que hay, ya lo sabía antes de empezar. El descenso me lleva otra vez junto al río, o canal, o lo que coño sea esta vez.


Hala, a rodar un rato. De nuevo por carriles bici estrechos, a veces con baches, a veces con baldosines, a veces por la derecha, a veces por la izquierda. Esto es una gincana.


La última subida de esta vuelta circular es el Posbank. Es superlarga, de dos kilómetros, para subir a otra colinita que se aprecia desde el canal, en una zona boscosa muy frondosa.


Es corta y de escasa entidad, así que no me cuesta nada llegar arriba. El mayor problema radica en la indefinición de la cima, ya que hay varias pistas entrecruzadas y no consigo saber dónde está el punto más elevado, si es que lo hay, porque la cumbre parece llana.


Decido terminar en una zona con carteles indicadores de rutas de senderismo. Es una zona tranquila donde solo me encuentro con dos o tres beteteros haciendo senderos.


La bajada me devuelve a la civilización y continúo ya de camino de regreso por otro carril bici paralelo a una carretera con bastante densidad de tráfico.


Al salir de Velp metí el track por la orilla de un canal siguiendo imágenes de Google Maps, y hay veces en las que no puedo seguir porque no están en buen estado. De todas formas, con el GPS me manejo bien y no tengo muchos problemas para seguir.


Con Beek ya a la vista, empieza a chispear ligeramente y a soplar un incómodo aire de cara para tocar las narices en la parte final.


Hasta que llego al coche y empieza a llover mientras recojo y me cambio de ropa. Bueno, de lo malo malo he tenido suerte otra vez. Aún es pronto, con lo que toca desplazamiento a Alemania, a las inmediaciones de Bonn, lo que posibilitará que haga otro puerto en el día de hoy.

Safe Creative #1007090003507

0 Comentarios