Al sur de Munich

13 de julio de 2021

Han pasado 24h desde que ayer recibiera el SMS de las autoridades germanas para presentarme con un pase covid. Había decidido marcharme ayer al terminar la jornada pero opto por hacer los dos pequeños puertos que tengo al sur de Munich antes de salir rumbo a la frontera francesa.



En Rottach-Egern da comienzo la subida a Wallbergstrasse, una ascensión de siete kilómetros al 10% quese puede llegar a hacer dura en alguna rampa.


Esta subida es de esas que se inicia con barrera de peaje para vehículos motorizados, lo que suele garantizar una ascensión cómoda y tranquila. Además, el día está muy nublado y es demasiado temprano como para que haya gente.


Los dos primeros kilómetros son un poco de calentamiento. Pero en los seis kilómetros que vienen después ya no se baja nunca de la doble cifra, con un final tremendo.


Se trata de una subida boscosa, con torrente lateral y carretera estrecha. Como no hay vistas que apreciar, todo queda para la dureza de las rampas.


La parte final, tras pasar una barrera canadiense, es la más dura, pero también la más chula. El bosque se abre un poco y el paisaje se torna más bruto.


Se pasa al lado de una cabaña y la pista se estrecha cada vez más, aumentando la pendiente más todavía. Es una parte final con mucha dureza, hasta que el piso desaparece y la grava se adueña del terreno.


La siguiente parada es también para hacer otro puerto corto, pero esta vez mucho más suave. Se trata del Kesselbergstrasse, que tiene su inicio en Kockel am See.


Terreno completamente llano hasta llegar al lago de Kochel, desde donde parte la subida por una carretera amplia, en lo que es un puerto típico.


No pasa absolutamente nadie por aquí y voy haciendo camino en estos seis kilómetros al 4,5% de media. Es un paseo para terminar la zona y emprender el viaje de vuelta a casa.


Termino con este segundo puerto del día y todavía son las nueve de la mañana, momento de regresar a casa porla frontera francesa de la Selva Negra. Cuando me estoy acercando, decido pasar por Balingen para acercarme a una comisaría de policía, no sea que luego me llegue alguna multa a casa.

En la comisaría de Balingen me atienden sin mascarillas, cosa que me sorprende, y hablando un perfecto inglés. Me dicen que no haga ni caso al SMS que he recibido, preguntando tan solo si tengo síntomas, y que si estoy de paso no tengo que hacer nada. Como he decidido regresar ya, así lo indico y me dejan marchar sin mayor historia, cosa que aprovecho para terminar el día con el Lochenpass, que empieza justo en una rotonda cercana.


Pues nada, ocho kilómetros de carretera al 4,5% me sirven para estirar las piernas un poco antes de regresar a casa. Apenas me encuentro tráfico pero empieza a chisear un poco.


La ascensión me resulta tan aburrida que apenas hago fotos, subiendo casi a piñón fijo, más preocupado por si llueve que por otra cosa. No me apetece acabar mojado antes de emprender tan largo viaje. Hay un kilómetro central al 9% que resulta un poco exigente pero nada más.


Otro puerto de la Selva Negra que cae, aunque tendré que volver el mes que viene para terminar. Y lo que son las cosas, en cuanto llego a casa me entero de que esta noche habrá inundaciones en esta zona, con desprendimientos brutales como nunca se habían visto en Alemania. Y pensar que podría haber estado durmiendo en el coche en alguna de esas laderas que se han llevado las riadas. Al final voy a tener que dan las gracias a las autoridades de Baviera por haberme enviado ese SMS. De no haber sido así, a saber lo que hubiera pasado.

Safe Creative #1007090003507

0 Comentarios