La mancomunidad de Uribe-Kosta

Hoy toca volver a ponerse en marcha. Me he tomado dos días libres de ejercicio para descansar de la Transpirenaica pero hay que volver a activarse, poco a poco. Aún mantengo molestias leves en el cuádriceps de la pierna derecha, muy localizadas en el vasto interno, donde me sigue doliendo al tocar con los dedos. No parece que sea mucho, así que prefiero moverlo a que se quede aletargado. Es un consejo que oí una vez a un doctor para las lumbalgias y tenía toda la razón del mundo: mejor mover suave que dejar quieto, aunque en un principio moleste un poco.

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Mancomunidad Uribe-Kosta Plentzia 35 km 490 m+ IR

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Como no quiero hacer mucho y me apetece ir a la playa porque ha salido un día cojonudo, decido acercarme a Gorrondatxe pasando por los siete municipios de la Mancomunidad de Uribe-Kosta, que se pueden tocar en poca distancia.


Obviamente, salgo de Plentzia y, a mitad de la playa, ya estoy en Gorliz. De hecho, siempre he pensado que estos dos pueblos deberían fusionarse, ya que la calle en la que vivo tiene la peculiaridad de que una acera pertenece a uno y la otra, al otro a medias, estando mezclados en varios puntos más. Han ido creciendo ambos y ya no hay ninguna separación entre ellos.

Lo más destacable es el momento en el que me subo a la bici, ya que estoy a punto de caerme al suelo. Es tan ligera de peso que no la controlo, sobre todo, el manillar. Levanto la bici con un dedo y la dirección está superblanda, tanto que tardo como un kilómetro en tomarle la medida.


El siguiente municipio en tocar será Lemoiz, ya que el barrio de Andraka pertenece a él. La subida la hago con cuidado de no dañar más el músculo lesionado. Hay un momento en el que me pongo en pie para probar y el manillar se me va hacia los lados. En la Transpirenaica solo llevaba alforjas traseras pero el peso total de la bici anclaba la dirección mucho, por lo que se ve. No era consciente de ello.


Con este panorama, bajo con cuidado hacia Maruri-Jatabe para tomar la rotonda rumbo a Urduliz, el cuarto municipio de la lista. Ni siquiera suelto el manillar para hacer fotos en todo este tramo por miedo a que se me vaya a un lado. Es una pasada lo diferente que se siente la bicicleta sin peso. En Urduliz hago ademán de subir Unbe para desviarme en el cruce de Sopela y tirar para Berango, haciendo el quinto y el sexto municipios que también están pegados.


La playa de Gorrondatxe también es conocida como la playa de Azkorri por estar en ese barrio de Getxo que pertenece al Gran Bilbao, pero es una playa con acceso asfaltado por los acantilados, por una pista que me permite llegar con la bici de carretera y en la que puedo tomar el sol en bolas, a escasos metros de Berango, ideal porque es de arena pero con las dunas cubiertas de hierba para no pringarnos ni la bici ni yo. Después de una hora de relajación, solo me queda regresar pasando por Barrika, el séptimo y último municipio de la mancomunidad de Uribe-Kosta por el que transito en una circular de solo 35km. que me sirve para retomar el pulso a la bici.

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2 Comentarios

  1. Jajajaja, me has recordado el viejo chiste del que va con un yunque en brazos por el desierto...
    Ahora te das cuenta del peso que arrastrabas.

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    1. ¡Brutal! Tirando de las alforjas no era tan consciente como al quitarlas. Casi me caigo en la primera pedalada y toda la salida con el manillar temblando. Me ha costado tres salidas acostumbrarme.

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