19 de agosto de 2019
Acabo de regresar de mis vacaciones de este año en Los Alpes, con lo que ha sido el viaje más cañero que me he metido hasta la fecha. Ha sido un mes completo de realizar subidas alpinas, todas las que me quedaban del juego en la cordillera y que habían ido quedando aisladas en otras temporadas, desde Francia hasta Eslovenia, con una primera incursión en Los Balcanes haciendo algunas subidas de Croacia.
Lo primero que debo reseñar es que el BIG ha establecido un cambio de normas a mitad del juego y ya solo es posible apuntarse subidas, si has pasado de 164, pasando por caja. Haré una entrada sobre este tema en los próximos días pero como emprendí este viaje creyéndome participante del juego, el resumen de datos lo haré como tal antes de pedir que me eliminen del listado porque no pienso pagar ni un duro por subir puertos que están ahí para quien quiera subirlos. Terminaré las 1000 subidas pero por mi cuenta, por supuesto.
En lo referente a los puertos, como siempre, ha habido de todo. Si tuviera que elegir uno solo, me quedaría con el Mangrtsko Sedlo de Eslovenia que me ha parecido brutal. Además, me ha sorprendido mucho, ya que no esperaba gran cosa según me iba yendo del núcleo de Los Alpes.
Han caído, por fin, subidas duras que no tenía: Grosse Oscheniksee en Austria y el Zoncolan en Italia. Ni el uno ni el otro me han parecido más duros que el Angliru, por mucho coeficiente que se le otorgue al primero. El que sí me ha costado un huevo ha sido Punta Veleno en Italia, tal vez porque me ha pillado de sorpresa, pero es que esos cuatro o cinco kilómetros seguidos al 16% hacen mucha pupa.
A nivel paisajístico, ¡qué decir!, Eslovenia ha sido la gran sorpresa y Croacia la gran decepción. Zagreb ha pasado a ocupar el número uno de capitales horribles, por delante de Andorra La Vella. Por lo demás, un disfrute continuo, con especial mención del Lago di Garda que me ha parecido excepcional.
¡Y cómo no! No podía dejar pasar la mención habitual a los controles policiales. En esta ocasión me han pedido la documentación en Francia, en Suiza, en Italia y en Croacia todas las veces que cruzaba su frontera, ya que no pertenecen al espacio Schengen. A Austria he ido ya varias veces y nunca me han dicho nada, a parte de ser gente muy maja, amable y hospitalaria, siempre con una sonrisa, un buen saludo y sin poner ninguna pega al visitante. En Eslovenia he sentido algo parecido. Bueno, de todo ello hablaré en las crónicas diarias, que esta vez llevarán su tiempo.
Y seguiré con las 1000 subidas por mi cuenta. Ahora que he acabado con Los Alpes, ahora que estoy cerca de cumplir medio siglo, eliminaré de mi vocabulario la palabra BIG pidiendo que me borren de la lista como ya hice con el CIMA, pero me embarcaré en viajes por el este de Europa, por el norte del continente y por el sur de Italia, que es lo que me queda. Son muchos países por conocer y qué mejor manera de hacerlo que a través de sus puertos de montaña. Ahora que he tachado la cordillera gorda, todo será más fácil.
89 nuevas conquistas:
El listado completo de los 603 BIGs realizados ya no se encuentra disponible AQUÍ. Realizaré mi propia lista a la mayor brevedad posible y pasaré a enlazar con ella.
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