Argalario sigue en su sitio

Ya ha pasado una semana desde el viaje a Tarragona y casi ni me he dado cuenta. Quería hacer una ruta larga el viernes o el sábado pero no ha habido manera porque no para de llover, lo que también ha hecho que cancelara mi primera marcha del año en Artziniega porque tiene que haber unos barrizales impresionantes. Hoy hay una pequeña mejoría pero no me quiero arriesgar en una ruta de muchos kilómetros, así que salgo poco antes de las once de la mañana rumbo a Argalario, una subida que me encanta para salidas de menos de dos horas.

XTREM

CAT 1

CAT 2

CAT 3

CAT 4

ARGALARIO, ida y vuelta

Bilbao

40 km

700 m+

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La mañana ha quedado muy maja, con una temperatura muy agradable, ideal para andar en bici. Me he puesto el culot corto, en parte porque no hace frío pero, sobre todo, porque no quiero más heridas en el culo.

Ayer estuve arreglando el cable de cambio trasero y tenía alguna duda sobre la sincronización pero parace que todo marcha de cine, incluso algo mejor que antes. Los piñones centrales me rascaban algo y ahora funcionan con más suavidad.

Solvento los tramos duros de esta primera parte de la subida con muy buen ritmo y con muy buenas sensaciones. La bicicleta tiene de bueno que enseguida se recupera el golpe de pedal.

En la parte central del puerto me caen un par de gotitas pero no termina de arrancar a llover. Los árboles están desnudos de hojas pero esta subida me sigue encantando.

Me sorprende ver a tres o cuatro corredores bajando mientras yo subo. Van sueltos, de uno en uno, y es que el día que ha salido es para aprovecharlo.

Llego arriba apretando un poquito. Me he encontrado tan bien que me lo puedo permitir. Las vistas son extensas hacia todas partes.

Se está tan bien que me quedaría un buen rato pero no lo hago porque quiero comer pronto para doblar sesión en la piscina. Me da un poco de pena no haberme atrevido esta mañana a marcarme una ruta larga porque el día lo pide.