El Veleta puede esperar

Tras una jornada completa de coche, llego a Granada a medianoche. Establezco el primer campo base en Huétor Vega para hacer una ruta 3 en 1 empezando de madrugada. Aquí dormiré. El Veleta es el gran objetivo del día, ya que aún no ha caído ninguna nevada en la zona y puede que a partir de hoy ya sea misión imposible. Pensaba llegar un día antes, pero no ha podido ser.


A las 6 de la mañana, aún de noche, pongo rumbo a Monachil, inicio oficial de El Purche. Es la vertiente de Sierra Nevada que he elegido para poder hacer un dos por uno. El día muy complicado, hace mucho viento y está chispeando.

El Purche no se me hace especialmente duro, aunque los números digan que lo es. La salida de Monachil es lo más complicado pero de noche, y herradura a herradura, tampoco es para tanto. La parte final suaviza mucho.

Empalmo con la subida a Sierra Nevada amaneciendo... y lloviendo. ¡Mal día para subir al Veleta! A medida que cojo altitud el viento es más y más fuerte. Tanto, que tengo que darme la vuelta al llegar a Pradollano. Soy incapaz de avanzar un solo metro ante la fiereza del tormentón matinal. Además, parece que por arriba ha comenzado a nevar. Me adelantan varios Patrol de la Guardia Civil, lo que deja bien claro que la cosa se puede estar complicando.

Había dejado el descenso para hacer alguna foto pero la lluvia no me da mucha tregua para sacar la cámara. Aún así, estas son las vistas que ofrece la subida a Sierra Nevada por esta vertiente.




Igualmente, bajo la lluvia, desciendo El Purche. Algunas paradas para "capturar" el paisaje son obligadas.






En el coche, de cabeza a por la toalla. Como algo y me piro para Cumbres Verdes, una corta subida que empieza en La Zubia, a un par de kilómetros de donde estoy. Esta subida tiene una pendiente mantenida bastante fuerte y un carril bici entre árboles de inicio a fin. En él me metí a mitad de subida por hacer el chorra un poco, ya que la subida es bastante feota. En una urbanización dí un par de vueltas. Supongo que terminaba allí por los kilómetros que tenía anotados. Para estar donde está, me pareció prescindible.




Vuelta al coche. Espero que pare de llover un poco porque el inicio de la mañana ha sido una pasada. El Veleta, imposible. Como voy a estar muchos días, lo volveré a intentar en otra ocasión. Ahora, empezaré por ir haciendo puertos hasta Jaén.

Tiro para el norte por la autovía hasta El Chaparral, inicio de La Alfaguara, una subida más larga pero tremendamente fácil. El principio es una castaña, pero a medida que se va ascendiendo se va poniendo más interesante por las amplias vistas que se van teniendo y por lo abrupto del paraje por el que se transita. La lluvia ya no es tan intensa, aunque la niebla es dueña del bosque del parque al que se llega en la cima. Me encuentro a un grupo de corredores bajo la incesante llovizna. ¡Curioso!










Me desvío por Pinos Puente para llegar a Illora, desde donde subir a Parapanda. El paisaje es muy constante: olivos, olivos y más olivos. La subida es por carretera decente al principio pero, tras coger el desvío al repetidor de TV Parapanda, la cosa se pone muy chunga. Por ahí no hay quien suba. Barro, charcos, boquetes, agujeros, piedras, ..., subo hasta que mi paciencia se agota y me tengo que dar media vuelta.










Entre más olivos (es como si siempre estuviera en el mismo sitio) llego a Alcalá la Real. El pueblo bien merece un par de fotos.




La siguiente subida será La Martina, otro puerto tendido de los de hacer del tirón y a muy buen ritmo. Muy bonito, por cierto. Por primera vez cesa de llover y puedo sacar la cámara a paseo más a menudo. Olivos, olivos, ... Es temporada de recogida y ¿cómo darán a basto? Hay miles y miles. El final del puerto, sin cartel, un poco sosote. Aquí no parece que haya carteles de puerto por ninguna parte.









Ya se está haciendo tarde. Espero terminar de día la corta subida al Embalse de Quiebrajano, o Las Coberteras, como se llame. El desvío está difícil de encontrar o, mejor dicho, de saber cuál es. Un agricultor de la zona me echa un cable y me dice que le siga en el coche, pues él va a pasar por allí. Dejo el coche en la cuneta, de mala manera, y para arriba por esa estrecha carretera que me lleva rumbo a la niebla que cierra el collado. El embalse yo no lo veo por ninguna parte. Supongo que por allí andaría, pero la niebla me impide verlo.







Llego al coche aún de día, pero por los pelos de Blas. Voy a pasar por delante de La Pandera, pero la dejaré ya para el día siguiente. Y, como es muy cortita, decido hacer nocturna la subida al Castillo de Santa Catalina de Jaén. Así busco un sitio para ver el Barça-Madrid de hoy y puedo pasar unas horas entretenido. Arriba hay un parador o algo así, pero por no bajar al coche y volver a subir de nuevo, busco algo por Jaén.



No encuentro nada. Jaén es como un pueblo grande pero petado de coches. ¡Menudo tráfico! Así que me piro al punto de inicio del siguiente CIMA: Albánchez. Allí dormiré, en Jimena. En el bar de la plaza veo la segunda parte del partido, ya que la primera me la paso en el traslado. El gol de Ibrahimovic hace que se descojone de todos el único culé que asoma en semejante feudo madridista. Yo no soy culé pero sí antimadridista y, por si acaso, no me río.

6 Comentarios

  1. ¿Se están haciendo de rogar el relato y las fotos de tu última excursión andaluza, eh?
    Un abrazo Joseba.

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  2. Ese Enrique!!!

    Buff!! Ya te digo!! Ya me estuve un montón de tiempo para lo de los Alpes, así que, con esto, parecido. Como no paro, pues voy más al día a día a la hora de meter entradas al blog, dejando para ratos libres las de tantísimos días.

    Date cuenta que son casi 3.500 fotos de 80 puertos y lugares de paso. Hay algunas que ya no sé ni a qué puerto corresponden y tengo que ir mirando los metadatos para ver a qué hora las hice y así saber si son de un puerto o son ya del siguiente. Los pueblos ya ni te cuento. Voy mirando en el Viamichelín y hasta en el buscador de imágenes del Google compruebo si los pueblos son como el que tengo yo fotografiado o si me estaré equivocando con otro.

    Lo mejor es que me sirve para recordar las subidas y, sobre todo, para quedarme con los nombres. Parece que cuando lo escribes es cuando por fin lo registras en la cabeza. Por ejemplo, acabo de recopilar unas cuantas fotos de La Martina y si me llegas a preguntar hace unas horas por esa subida no habría sabido decir ni en qué provincia se encontraba ni si la tenía ya subida.

    Vamos, que entre tantísimas subidas al final te quedas con Sierra Nevada, Velefique, Peña Escrita, La Pandera o Gibraltar, las que realmente sean especiales por cualquier cosa.

    Bueno, iré poco a poco, puede que ni siquiera lo haga por días como en Alpes y sí por zonas. Ya veré!!

    Un abrazo, Enrique!! Un placer leerte de nuevo.

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  3. El placer es nuestro por saber de tus locuras: de la cuerda larga de Guadarrama supe a través del foro, pero mola ver tus fotos aquí; a ver si me prodigo más en dejar comentarios.
    Lo de no acordarte de los lugares y demás te pasa por moverte más que una bicha epiléptica, canalla, que con tanto viaje y tanto puerto te quedas sin retentiva!

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  4. Sí, ahora estoy metido de lleno en hacer ascensiones invernales y la cuerda era uno de mis objetivos de principios de año. Hace tiempo que lo tenía en mente. Ahora estoy mirando el tiempo cada día para hacer el Pico San Millán pero para esta no creo que encuentre guías, jejeje.

    ¡A ver si le pego un arreón a los puertos andaluces!

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  5. Veo que no paras ni aunque llueva. Te sigo en la distancia.

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  6. Aupi Javitxu!!

    No he parado en otras peores ... como para parar en estas! Si el invierno de allí es como el verano de aquí!!, jejeje

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