Veinte kilómetros con desnivel

Ya estamos en primavera y cada vez están más cerca los colosos pirenaicos que tenemos idea de hacer a la carrera. Nos faltaba un campo de entrenamiento de dureza para hacer saliendo de casa y la aparición de la subida a Fano nos lo ha solucionado. Entre esa y la del faro de Gorliz, asunto resuelto.



Salimos a las ocho y media de la mañana con un fresco que nos deja helados en cuanto pisamos la calle. A fin de estirar un poco el kilometraje, nos damos una vuelta por la zona alta de Plentzia y llegamos hasta la estación del metro, volviendo por el paseo de la ría y cruzando la playa.


Una vez que estamos en el rompeolas de Gorliz, nos ponemos a subir ya con el sol pegando con fuerza y calentando bastante. Empezamos con el faro de Gorliz, solitario entre semana, y seguimos con la pared de Fano.


Parece que las rampas por encima del 20% son del gusto de Amaia y la subida recibe su conformidad. Ya tenemos cuestón para poner las patas a punto y saliendo desde la misma playa.


Regresamos por Orabille, cruzando Gorliz, hasta llegar a la playa a la altura del PIE (Plentziako Itsas Estazioa - Estación Marina de Plentzia), completando casi veinte kilómetros para una salida corredera de cerca de 400m de desnivel positivo que nos deja a punto mucho antes de lo esperado.

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