Ayer estuve viendo las noticias en la tele y, en varias cadenas, comentaron lo de la famosa boina que se forma sobra Madrid y Barcelona cuando están hasta los topes de contaminación. Hasta ahí, lo normal, pero es que los muy cabrones pusieron una imagen de Bilbao y dijeron que aquí también, como para disculparles me dió la impresión. Pues no, ¡de eso nada, monada! En Bilbao lleva lloviendo la ostia de tiempo (de hecho es la única zona donde los embalses están por encima de lo habitual en estas fechas) y estamos rodeados de unos magníficos montes que hacen las veces de pulmones y que no nos da por quemar. Lo que hay sobre Bilbao estos días es... ¡¡niebla!! Y para probarlo, me voy a Argalario.
Entretenido observando la propundidad del valle del Nervión, voy pensando que el maromo de El Tiempo es tonto del culo. Hay una hilera de nubes sobre la ría y, producto del anticiclón y las altas presiones que tenemos sobre nosotros, se encuentra muy cercana a la ría. De hecho, en Bilbao estaba nublado. Pero aquí, a unos cientos de metros de altitud, la cosa es bien diferente.
Tras coronar Argalario, para completar un poco la salida, decido ir a subir el Serantes. La niebla que hay en el Abra de la ría me impide ver con claridad Punta Galea.
Por arriba, el sol que calienta cuando te quedas quieto pero con una brisa helada muy incómoda para ir en bicicleta. Hoy quería haber hecho una ruta larga pero la horquilla térmica es tan grande que te tienes que chupar demasiadas horas de frío en los extremos del día.
La niebla es tan densa, que ni siquiera se ven con claridad las casas de Santurtzi. Será que aquí también se han dejado los coches en marcha durante la noche.
Corono Serantes con bastante fuerza en la rampa final. Cuando soy capaz de hacerla íntegramente de pie sobre la bici es que no ando muy mal. Y hoy es uno de esos días.
Mirando hacia Cantabria, la cosa empeora. Ni siquiera se ve el mar. Se han debido traer unos cuantos barcos de vapor del Mississippi. Con tanta polución, habrá que permitirles que atraquen solo los días pares.
Mejor me voy a hacer una foto del cartel del Serantes, pero en casa, que aquí ya no me aguantan los bronquios. Tendré que avisar a la del tiempo de Tele5 para que lancen una alerta para no salir de casa por los elevados índices de contaminación que tenemos en el norte.
Ya quisiera más de uno respirar este aire.
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